Pensábamos que en realidad había cosas que nunca volverían a pasar. No hace tanto que las mujeres no trabajaban en España. No hace tanto que las mujeres eran básicamente para tener hijos. No hace tanto que en España necesitábamos de un hombre para poder sacar dinero de una cuenta. De eso no hace tanto tiempo, pero parecía imposible que algo así volviese a suceder. Sin embargo, las cosas en el terreno político parece que nos demuestran que se puede cambiar de la noche a la mañana.
Desde Pasiones, aunque hablamos de parejas, no podemos evitar hacernos eco del tema, primero porque yo soy mujer y me siento afectada, segundo porque nos siguen casi siempre mujeres, y tercero porque nos parece un conflicto social que afectará mucho a la pareja.
Aunque la cuestión de la modificación de la ley del aborto es la que más está presente, lo cierto es que los recortes en dependencia, una ayuda que hacía que muchas mujeres pudiesen consolidar su vida familiar y laboral; la reducción de cuotas en política destinadas a la igualdad de género, y los demás recortes sociales van a influir de forma negativa en el desarrollo de la mujer de forma profesional y nos llevarán a una obligada vuelta atrás de la mujer en España
Todo esto exige que la sociedad se revele, que las mujeres dejemos claro que nuestros derechos, con crisis o sin crisis no se toca y que ese machismo que aún está ahí tiene que terminarse con políticas de cambio, y que esas políticas no pueden fomentarlo.
Antes de terminar, decir que la modificación de la ley del aborto, la cuál nos venden como una apuesta por los derechos de los no nacidos, vulneran en la misma manera los derechos de la mujer a decidir que hacer con su vida, y que como ciudadana ya ha adquirido. Pero claro, si creemos una vez más que el hombre tiene más derechos que la mujer, porque él si puede evitar ser padre, el si puede eludir sus responsabilidades y nosotras no, ya se hacen una idea de que en pocos años, si no paramos esto, la sociedad será muy similar a la España de los 60. Y eso con la inmoralidad de los que pueden de irse a Londres a hacer lo que está prohibido. ¿De verdad queremos eso?