Cuando surgen problemas en la pareja, muchas veces optamos por mantenernos callamos en vez de sentarnos e intentar resolver los conflictos de a dos. Los problemas que se generan puertas adentro pueden desencadenar grandes crisis si no son tratados a tiempo o con la seriedad que requieren. La terapia de pareja, muy lejos de ser un castigo para ellos y una amenaza con la que ellas especulan, es una herramienta muy eficaz para consolidar una relación sana.
Como se realiza en un lugar neutral, es un espacio ideal para que ambos se puedan abrir y sentirse libres para decir lo que les molesta. Como el tratamiento es en conjunto, resulta más fácil escuchar al otro y comprender su punto de vista.La función del terapeuta es mediar en las discusiones y evitar que se desborden y enseñarles habilidades concretas de comunicación, para modificar patrones que afectan el vínculo. Sácate los prejuicios y abra tu mente a nuevas alternativas para mejorar tu relación de pareja; los resultados valen la pena. Recuerda que el diálogo y la comunicación son el recurso más útil para mejorar la pareja y resolver los conflictos con madurez.