Probablemente para muchos hablar de sexo tántrico sea hablar de algo que apenas se conoce, pero que empieza a tener un papel importante en muchas conversaciones de nuestra sociedad y entre las parejas a las que les apetece probar cosas nuevas. Y es que el sexo tántrico está de moda y parece muy saludable. Aunque puede que para algunos sea sin duda algo más mental que físico, la verdad es que no conozco a nadie que pueda tener un buen orgasmo si no tiene la cabeza dónde tiene que tenerla…
Probablemente, el sexo tántrico sea aún poco conocido, pero cada vez hay más opciones de conocer esta típica costumbre oriental en la que el orgasmo es el fin último, pero conseguirlo se convierte en toda una búsqueda en sí misma del placer absoluto. Y es que si las relaciones sexuales normales usan todos los medios para llegar al fin, que es el orgasmo; pero los preliminares y todo el acto sexual es solo un medio para conseguir el fin; en el sexo tántrico es más bien todo lo contrario todos los fines son válidos para llegar al fin último. Y lo más importante, no hay prisa…
La verdad es que a mi me ha llamado desde hace tiempo mucho la atención lo del sexo tántrico. Sin embargo, creo que es difícil pasar del sexo al que estamos acostumbrados a este tipo de relación sexual. Y aunque yo no lo he probado, parece que por todos lados me lo recomiendan. Habrá que apuntárselo…