Está de moda llevar al cine los grandes best seller literarios. Es una tendencia en auge y he de reconocer que se ha perfeccionado bastante la técnica, al menos, en algunas películas. Desde luego siempre que hemos leído un libro y, después, vemos la película solemos quedarnos con el libro. La literatura tiene un inmenso poder que no tiene el cine: dispara la imaginación de un modo completamente libre.
En el cine, no obstante, se nos imponen unos rostros y escenarios que quizás ya hemos inventando en nuestra cabeza de otra manera. De todos modos, en los últimos tiempos, se han hecho maravillosas adaptaciones que poco tienen que envidiar a la obra original. Una de las adaptaciones más recientes ha sido la polémica “Diario de una ninfómana” basada en la obra del mismo nombre de la sexóloga Valerie Tasso.
Quizás uno de los aspectos más originales de este film es que esté basado precisamente en la vida de la propia escritora quien tras haberse licenciado en dos carreras, cursado un doctorado y trabajado en puestos de alta dirección decidió ejercer la prostitución en una agencia de lujo durante unos meses.
Tuve la oportunidad de conocer a Valerie hace poco más de un año y desde luego es una persona totalmente normal pero valiente y completamente exenta de prejuicios. Valerie es capaz de hablar de los aspectos más tabús del sexo de un modo tan natural que parezca estar hablando del tiempo. Me sorprende e incluso me escandaliza que hayan censurado el cártel de su película en Madrid. Realmente incomprensible a estas alturas.
El sexo como tabú, desgraciadamente, sigue estando a la orden del día. ¿Puede un niño por la calle ver cárteles sobre películas de violencia y, sin embargo, no puede ver la foto artística de una mujer en ropa interior que sitúa la mano en el pubis? ¡El mundo está loco! Os animo a ver la película y, como no, adentrarnos en el maravilloso mundo erótico literario de Valerie. ¡Vais a aprender mucho!