Un diálogo de sordos
Generalmente cuando insistimos en «hablar» de la relación, lo que queremos es convencer, dejar claro nuestro punto de vista, como si el hecho de que lo entienda de una vez por todas fuera a resolver todos los problemas. Pero ¿te has parado a pensar alguna vez que tu pareja pueda tener otro punto de vista, otra versión de la historia, que también puede pensar que tú no comprendes y ésa es la clave de todos los problemas?
Cada cual tiene sus argumentos y su convencimiento, y a la defensiva, los ánimos se calientan y las mejores intenciones, dirigidas por el amor, acaban convirtiéndose en armas defensivas y ofensivas.