La verdad es que las excusas son una tónica diaria en todo lo que hacemos, y en el caso del sexo no iba a ser la excepción. Así hoy hablamos precisamente de eso, de excusas que solemos utilizar cuando el cansancio nos puede, o simplemente porque tenemos la cabeza en otro lado, no tenemos ganas de practicar el sexo con su pareja. Hoy vamos a hablar de las 4 típicas excusas que usamos cuándo no queremos hacerlo, y aunque sean de las de siempre, tengan cuidado, porque a veces, no son excusas si no que son de verdad, con lo que atención si van a armar un drama y resulta que no se trataba de un hoy no quiero, si no de un hoy de verdad que no puedo.
4 típicas excusas que usamos cuándo no queremos hacerlo
Estoy cansado y hacerse los dormidos: es la madre de todas las excusas para evitar tener sexo. Siempre funciona, aunque claro si llevamos todo el día sin hacer demasiado, y la pareja lo sabe, será un poco complicado mantenerla en pie sin que se den cuenta de lo que ocurre.
Me duele la cabeza: sale en casi todas las películas, y digo yo que por algo será. Sin embargo, a veces es cierto que los dolores de cabeza nos quitan las ganas de todo, con lo que antes de la bronca asegúrense que el dolor no es real, porque si no puede que lo agraven en serio.
No me siento bien con mi cuerpo: otro clásico que además suele esconder parte de realidad. Y ya saben chicas que hay que aceptarse como somos, porque la belleza es totalmente relativa.
No me apetece: en ligar de excusa yo diría que es una realidad. Si de verdad no tenemos ganas, lo mejor es dejárselo limpio y claro a nuestra pareja ¿Tampoco va a pasar nada por un día, no?